Karlos Arguiñano nos sorprende con una receta de fideuá de Gandía. Solo tendremos que tener claro el tiempo de cocción del arroz para que nos quede en su punto y agregar la proporción de agua precisa a fin de que continúe el estupendo caldo de la cocción una vez terminado el plato. Se trata de un arroz perfecto para acompañar con pan y disfrutar con tiempo.
Cuando ya haya pasado el tiempo de reposo, estírala con las manos y haz palitos largos de un centímetro de grosor, y después une los extremos dando forma a las rosquillas. Presiona bien la unión a fin de que no se abran al freírlas. Ahora ya las puedes freír en una sartén con rebosante aceite, mas asegúrate que esté bien caliente y de vigilar que no se te quemen. Cuando estén doradas, ya las puedes sacar y ponerlas en un recipiente con papel absorbente para que se elimine el aceite excedente. Espolvorea con azúcar tafetán azúcar y canela al gusto.
Separamos del fuego y dejamos reposar solo dos-tres minutos, no queremos que se nos pase de punto. Además de esto debe quedar algo de caldo, y si lo dejamos un buen tiempo en reposo, el arroz proseguirá hinchando y absorbiendo caldo. Al plato directamente y no os queméis.
Mas Wikipaella va más allá de delimitar las recetas «tradicionales». En su misión de acotar, promocionar y defender las auténticas paellas han formado un conjunto abierto, anónimo y voluntario de usuarios de la plataforma que movidos por su entrega y espíritu paellero, visitan arrocerías de todo el mundo con un doble objetivo: «Desenmascarar las injusticias de quienes reinventan la receta a su antojo y venden arroz con cosas bajo el nombre de genuina, tradicional, typical Spanish Paella y descubrir restaurantes donde tratan el arroz y sus recetas de auténtica paella con profesionalidad, cariño y respeto por la tradición».
Ya me gustaría a mi que me saliese la paella valenciana tradicional tan buena como a mi suegra. Esta que veis en las fotos estaba de infarto, con sus socarraet” y todo (el arroz quemado del fondo), bien secundada por la buena compañía, una cervecita y previo baño en la piscina. Y es que no hay nada como un domingo con paella.
Conforme en todo. No he leido más que el primer comentqrio de los lectores, y es una tal Ana. Afirma que se tiene manía con lo que comen los demás, y que si no te agrada no lo comas. Me parece correcta su apreciación. Mas dejándolo ahí hubiese estado bien. No es necesario que describas la pizza de Piña y roquefort como deliciosa. Estoy tomando el café de la mañana y ya me has dado el día. Qué asco más grande! Vamos a decir barbaridades: Morcilla con cholate, al menos estos ingredientes casan el gama cromática. Me niego a ller más comentarios. Tengo ganas de devolver.
